- ¿Qué estamos haciendo para que nuestros hijos adolescentes no beban en esta celebración? Selva Careaga, psicóloga experta en prevención y a cargo del taller “Educar en Familia de CCU”, nos entrega sus recomendaciones. ¿La más importante? Ser un buen modelo de conducta. Nuestro comportamiento es fundamental.
Volantines, asado, fonda y cueca. Amigos, familia y mucha celebración. Las Fiestas Patrias están a la vuelta de la esquina. Y, así también, todas esas ganas de disfrutar y festejar un nuevo aniversario del país, siempre celebrando de manera responsable.
Pero ¿cómo aplicamos este llamado cuando se trata de nuestros hijos? ¿Sabemos cómo celebran el 18 con sus amigos? ¿Hacemos algo para prevenir que consuman alcohol? Esta preocupación no es menor. En Chile, la edad promedio de inicio de consumo de alcohol se ha adelantado a los 13 años y hay estudios que revelan que uno de cada cuatro adolescentes comienza a ingerirlo a esa edad o incluso antes.
En esta edición de EnCCUentro queremos apoyar a los padres y madres a conocer más de este tema y entregarles recomendaciones de la mano de una experta: Selva Careaga, psicóloga clínica especialista en prevención de consumo de alcohol y quien imparte el taller “Educar en Familia” que realiza CCU a padres, madres y apoderados de establecimientos educacionales y recintos penitenciarios.
– ¿Por qué el alcohol es malo para los niños, niñas y adolescentes?
Porque está comprobado que afecta a su desarrollo físico y socioemocional. El cerebro termina de desarrollarse a los 20 años, siendo lo último la corteza prefrontal. Esta área es clave, pues permite la función ejecutiva, la cual se relaciona con nuestra capacidad de poner atención, concentrarnos, controlar impulsos, evaluar y prevenir los riesgos, entre otros.
De esta manera, si un adolescente toma alcohol a edad temprana no solo se afectan estas funciones, sino que se impacta su desarrollo psiconeuronal y la estructura misma del cerebro (hipocampo), podría verse afectada. Cuando esto sucede, los niños menores de edad reducen su capacidad de aprender, de memorizar y aumenta su capacidad de cometer errores, puesto que se les hace difícil anticipar. A esto se suma que cuando se ingiere alcohol se altera el funcionamiento de la corteza afectando el comportamiento y las relaciones interpersonales.
-¿Cómo puedo prevenir que mis hijos consuman alcohol de manera temprana?
Aquí lo principal son los padres. Ellos constituyen el principal modelo de consumo de alcohol para sus hijos, pues ellos aprenden de su conducta. A esto hay que sumar que los estudios demuestran que el lugar donde comienzan a beber los adolescentes es en sus hogares.
El rol de los padres es fundamental. A partir de los 10 años, comienza la descarga hormonal en los niños y hay un impulso a la acción muy fuerte por parte de ellos. El problema es que, al mismo tiempo, hay escaso desarrollo de la corteza prefrontal que es la que nos hace reflexionar. Entonces, los padres deben ser un polo de reflexión y contención. Juegan un papel fundamental en el desarrollo de la capacidad crítica.
– ¿Qué opina de la creencia de “enseñarles a los niños a tomar de pequeños para que adquieran cultura alcohólica”?
Esto no hay que hacerlo por ningún motivo. Cuando impulsamos a los adolescentes a beber antes de que sean mayores de edad, lo que estamos haciendo es aumentar su tolerancia al uso de alcohol y ese es el mayor riesgo. La embriaguez tampoco debe ser aceptada, pues es algo muy grave. Es una intoxicación y también una señal de que mi cuerpo no fue capaz de metabolizar el alcohol. En Chile consumimos menos alcohol per cápita que otros países. El problema es que el consumo es más intenso, de una vez y la embriaguez se ha normalizado.
Para información del «Programa Promoción del Consumo Responsable de Alcohol 360°” de hacer CCU , click aquí
** REPORTAJE PUBLICADO EN LA REVISTA ENCCUENTRO DE AGOSTO, PARA REVISARLO HACER CLICK AQUÍ