COVID-19

Publicado el 26 de marzo 2020

En CCU, en Chile y los cinco países de la Región en que operamos, desde el inicio de esta emergencia sanitaria del COVID-19, nos planteamos dos objetivos:

  1. Cuidado de nuestros trabajadores y trabajadoras, así como de las personas con las que nos relacionamos.
  2. Continuidad de nuestras operaciones.

Ambos objetivos están íntimamente relacionados, pues combinados conducen al bien común.

Primero, el cuidado de nuestros trabajadores y trabajadoras, así como de las personas con las que nos relacionamos, busca idealmente evitar contagios y, en todo caso aplanar la curva de estos, con el propósito de no colapsar la capacidad de atención en los recintos de salud de nuestros países, lo cual es clave en la protección de la vida de las personas.

Segundo, la continuidad de nuestras operaciones, es muy necesaria. En el extremo, si toda la actividad de nuestros países se detuviera, caeríamos en un grado de fragilidad tal, que se produciría un daño enorme a nuestras vidas, y evitarlo o mitigarlo también es clave en la protección de la vida de las personas.

Lo más importante para CCU es preocuparnos de ambos objetivos, contribuyendo así al bien común, en línea con las disposiciones que emanen desde las autoridades.

En CCU, para los casos de COVID-19, se activa el PROCEDIMIENTO CCU FRENTE A CONTAGIO COVID-19 Y SU TRAZABILIDAD. Este procedimiento permite adoptar las medidas necesarias de resguardo para los afectados, para todas las personas con las que tuvieron contacto, así como para con sus lugares físicos de trabajo.

Además, cuida la debida confidencialidad de la información, define las medidas de sanitización de los lugares, herramientas y equipamiento de trabajo; el cuidado y eventuales cuarentenas a las que deben someterse quienes tuvieron contacto con él y el seguimiento de los casos siempre en comunicación y coordinación con la autoridad de salud.